En la exposición de flores y jardines del RHS Hampton Court Palace Garden Festival 2024 se revelaron las últimas tendencias en jardinería y horticultura. El evento hortícola destacó innovadoras soluciones para espacios reducidos y propuestas de plantación orientadas al futuro, presentadas por reconocidos diseñadores de jardines contemporáneos.
Organizado por la Royal Horticulture Society (RHS) —la misma institución responsable del prestigioso RHS Chelsea Flower Show —, el festival reafirma su papel como un referente en el mundo del paisajismo y la jardinería.
Se expusieron ideas inspiradoras para huertos familiares y espacios pequeños de plantación, junto con jardines diseñados por nuevos talentos que incorporan prácticas sostenibles en áreas al aire libre. A partir del próximo año, este evento hortícola se llevará a cabo cada dos años.
1. Horticultura sin turba



Jardín de exhibición. RHS Jardín sin turba, diseño de Arit Anderson. Fotos: © Alejandro Vargas
El compost sin turba ha sido un tema de debate en el mundo de la jardinería, con algunos jardineros que sostienen que la turba es insustituible para el cultivo de plantas. Sin embargo, Arit Anderson, presentadora de Gardeners’ World, está desafiando esta idea con el diseño del RHS Peat-Free Garden (Jardín sin Turba de la RHS).
Con este proyecto, Anderson busca demostrar que es posible crear jardines exuberantes y saludables sin recurrir a la turba, promoviendo prácticas más sostenibles y respetuosas con el medio ambiente. Renunciar a la turba no significa sacrificar el color ni la textura en el jardín. El diseño de Anderson incluye una zona de estilo natural que imita una turbera intacta y otra con un diseño doméstico reconocible, ambas rebosantes de vida y aptas para el cultivo de plantas.
La turba se forma a partir de la descomposición parcial de vegetales en ambientes con escaso oxígeno y alta humedad. Su acumulación es extremadamente lenta: apenas unos 10 centímetros cada 100 años. Para que se forme un solo metro de turba, se necesitan más de 1,000 años. Sin embargo, en algunos lugares se extraen hasta 22 m de una sola vez, lo que equivale a borrar de golpe 22,000 años de desarrollo natural.
Este recurso natural, rico en carbono y nitrógeno, es conocido por retener bien el agua, lo que promueve el crecimiento saludable de las plantas. Durante mucho tiempo, la turba ha sido un componente esencial en el abono utilizado en horticultura y vendido en centros de jardinería.
Sin embargo, las turberas son ecosistemas frágiles, ricos en biodiversidad y fundamentales como sumideros de carbono. Por ello, organizaciones ecologistas y de conservación han instado a prohibir el uso de la turba en jardinería. En el Reino Unido, el gobierno había previsto vetarla para los jardineros en 2022, pero la medida se ha pospuesto hasta el 2030. Por su parte, la RHS prohibirá la turba en sus jardines y exposiciones a partir de 2026.
2. El sauce está en su apogeo


Jardines de exhibición. Izquierda: RHS Peat-Free Garden – diseño de Arit Anderson; derecha: The Wild Child Cornwall Garden, diseño de Victoria Jane Cucknell.
El sauce está ganando protagonismo en muchos jardines de exhibición, gracias a su estilo natural y versatilidad. Su uso abarca desde contenedores de compostaje y guaridas para la fauna, hasta cercas decorativas y soporte para plantas. Por su flexibilidad y accesibilidad, el sauce se convierte en un material ideal para quienes desean experimentar y personalizar sus espacios al aire libre con creatividad y sensibilidad ecológica.
3. De adentro hacia afuera
De izquierda a derecha: armario con plantas (Kent Wildflower Seeds), estuche Wardian (Brunel’s SS Great Britain), y una siesta entre hostas.
Los muebles han encontrado un nuevo hogar en nuestros jardines y balcones, transformando espacios exteriores con ingenio. Desde armarios hasta camas reutilizadas, dan a los jardines un aire acogedor.

La incorporación de muebles reciclados no sólo da nueva vida a piezas retro, sino que también enriquece el estilo shabby chic, una tendencia decorativa originada en las antiguas casas señoriales de Gran Bretaña. Este estilo combina armoniosamente lo antiguo con lo moderno, creando ambientes con encanto y carácter. Aunque aplicar una capa de barniz puede prolongar la vida útil de los muebles, muchos prefieren conservar las pátinas naturales que el paso del tiempo les otorga, apreciando su autenticidad y belleza envejecida.
4. Amarillo versus tonos oscuros
Despliegues florales de izquierda a derecha: The Lighthouse Garden, The Lyon King Anniversary Garden, y Kent Wildflower Seeds.
Aunque muchos diseñadores evitan el amarillo en bordes florales, este año el amarillo limón brilló en Hampton. Desde el jardín A Reinvention of Yellow del colectivo Garden Girls hasta The Lyon King Anniversary Garden de Juliet Sargeant, esta vibrante tonalidad iluminó la exhibición floral con audacia y frescura.
5. El seto natural

Seto de madera en el jardín de aniversario del Rey León
El seto natural construido con madera muerta se compone de postes que sostienen ramas y restos de podas dispuestos en capas sucesivas. A medida que el material se descompone, se incorporan nuevas capas, creando una estructura natural dinámica y en evolución. Además de reducir los residuos orgánicos, este tipo de seto ofrece un valioso refugio para la fauna local, fomentando la biodiversidad en el jardín.
6. Senderos a diferentes niveles
De izquierda a derecha: senderos de madera en The Sounds of Adventure Garden y en The Explore Charleston Garden.
En el Hampton Court Palace Garden Festival, una de las tendencias son los senderos a diferentes niveles, que no sólo añaden una dimensión estética al paisaje, sino que también crean distintas perspectivas dentro del jardín. Por ejemplo, un sendero de madera puede funcionar como banco en el jardín, mientras que una rampa suave conduce a una glorieta abierta.
En varios jardines se han observado las zonas hundidas, las cuales crean espacios de estar elegantes y modernas. Un diseño que permite rodear el área con plantas y añadir un toque de dramatismo al jardín. Además, estas características son ideales para proporcionar privacidad y una sensación de tranquilidad en el jardín.
La reutilización de ramas, tallos, hojas y restos de comida como fertilizantes, permite mantener un ciclo de cosecha continuo sin necesidad de agregar tierra o abono.
7. Semillas que perduran

Tras la pandemia y el conflicto en Ucrania, ciertos alimentos básicos (como el trigo ucraniano) enfrentaron amenazas que despertaron preocupación en la población. Como respuesta, ha surgido una tendencia creciente: cultivar alimentos en los propios jardines. Muchos jardines y estands florales de exhibición mostraron formas creativas e inusuales de presentar verduras, desde kokedamas (técnica japonesa que significa “bola de musgo”) hasta composiciones en marcos de fotos.
Un ejemplo destacado de esta corriente es She Eats Veg, una compañía especializada en semillas tradicionales de polinización abierta. En la marquesina floral del festival, presentó una instalación artística de verduras y frutas dispuestas en seis marcos dorados. Todas las verduras fueron cultivadas a partir de semillas de polinización abierta, lo que significa que sus flores fueon fertilizadas de manera natural por abejas, polillas, aves, murciélagos e incluso por el viento o la lluvia.
A diferencia de las semilla híbridas F1 (producto del cruce deliberado de dos variedades para obtener una nueva con características específica), las semillas tradicionales preservan la diversidad genética y la adaptabilidad natural de las plantas. Aunque todas las semillas tradicionales son de polinización abierta, no todas las de polinización abierta se consideran tradicionales, ya que esto depende de su origen y método de cultivo.
Nota del Editor: Este artículo fue publicado originalmente en la sección Horticultura el 6 de julio de 2024. Actualizado el 9 de junio de 2025 para revisar enlaces que ya no funcionaban.
Colaboración periodística:

Alejandro Vargas
Londres
Fotografía:
Alejandro Vargas
Edición:
Alba Rodríguez























