Bucaramanga fue sede de la 18ª Reunión Técnica Nacional de Palma de Aceite, que Cenipalma y Fedepalma llevaron a cabo entre el 26 y el 29 de septiembre de este año, con el lema “Retos de sostenibilidad para una palmicultura productiva e incluyente”, en el Centro de Convenciones Neomundo de la ciudad “bonita” de Colombia. Asistencia masiva de participantes. Conclusiones.

El cultivo de palma de aceite y su industrialización es una de las actividades agroindustriales que mayor crecimiento ha logrado en las últimas tres décadas y el aceite extraído de esta milagrosa planta constituye una fuente de riqueza para los inversionistas, los trabajadores de los cultivos y los propios consumidores.
Según reciente reporte de la Federación Nacional de Cultivadores de Palma de Aceite -Fedepalma-, a agosto de 2023, la producción colombiana de aceite de palma alcanzó 142,4 miles de toneladas, evidenciando un crecimiento de 10,9 %, respecto del mismo mes del año anterior, y una mejor distribución de la producción mensual de acuerdo con su estacionalidad.

Según el presidente de Fedepalma, Nicolás Pérez Marulanda, “la palma de aceite no es motor de deforestación en Colombia. El sector palmicultor tiene características que están en línea con la agenda del Gobierno nacional, tales como prioridades en el aporte a la producción de alimentos; inclusión productiva con modelos probados por más de dos décadas; transición energética con biocombustibles de primera generación con grandes oportunidades en biocombustibles avanzados; cogeneración de energía por la biomasa que se genera; aporte a la descarbonización y la diversificación de la canasta exportadora”.
Las estadísticas de Fedepalma dan cuenta de que en los últimos doce meses la producción llegó a 1,8 millones de toneladas de aceite de palma, que representa un aumento de 4,8 % frente al mismo periodo 2021/22.
Cabe mencionar que este buen comportamiento de la producción de la palma de aceite es jalonado por las zonas oriental y suroccidental que vienen registrando crecimientos por encima de los años anteriores.
En lo corrido de este año, las ventas totales de aceite de palma ya han alcanzado 1,2 millones de toneladas. El 71 % de esas ventas se destinaron al mercado local, sumando 910.000 toneladas, con un crecimiento de 5,5 % respecto del mismo periodo 2022.
Solo en el mes de agosto de 2023 se registró récord de ventas al mercado local con 121.000 toneladas, explicado por la disponibilidad local y los precios competitivos del aceite de palma frente a sus sustitutos. El segmento de aceites y grasas comestibles tuvo la mayor participación en las ventas locales, seguido por biodiésel y alimentos concentrados.
Entre tanto, las ventas al mercado de exportación sumaron 363.000 toneladas, con una ligera reducción de 4,6 %, respecto del histórico de ese mes del año anterior, siendo Brasil, México, Estados Unidos y el Caribe los principales destinos de estas ventas.

La invitación de Fedepalma es a cocinar con aceite de palma 100 % colombiano.
Colombia. Distribución de las ventas de aceite de palma por mercados local y de exportación:


Se presentaron los principales retos que tiene el sector palmicultor, desde el punto de vista técnico. Cabe anotar que el sector está inmerso en la economía circular lo que significa que busca a través de distintas prácticas que toda la biomasa y energía tengan ciclos cerrados, en otras palabras, un aprovechamiento económico y ambiental.
Los grandes retos y oportunidades del aceite de palma
Alexandre Patrick Cooman, director general de Cenipalma, manifestó que el sector tiene grandes retos en las tres dimensiones de la sostenibilidad: lo económico, lo social y lo ambiental.
Es así como hay un desafío para asumir el cambio climático y variabilidad climática donde se busca productividad sostenible, que perdure en el tiempo. Al respecto, según Cenipalma, hay trabajos particulares en curso para tener sistemas de riego y lograr más aprovechamiento del agua disponible, y también mejoría genética buscando tener cultivares con un mejor comportamiento en condiciones de estrés hídrico.

Un segundo reto está relacionado con la escasez de recurso humano y la inminencia de una transición y relevo generacional que implica apropiación del conocimiento por parte de los jóvenes, a quienes hay que impulsar para que se queden en el campo y generen riqueza. Allí también hay aspectos de contratación y capacitación que son relevantes y eso implica incursionar más en procesos de mecanización y tecnologías digitales para facilitar la labor de los trabajadores del campo.
Un tercer desafío es lo relacionado con prácticas ambientales porque el sector tiene indicadores positivos, aunque hay tres etapas que asumir: ser más exigentes y autodisciplinados en aplicar la tecnología a nivel de predio para tener una producción más armónica con el medio ambiente; estimular los procesos de formalización a través de una certificación como APS Colombia; y, lo tercero es comunicar los impactos positivos porque todavía hay estigmas hacia el sector y una percepción errónea.
Igualmente, Cooman dijo, las plantas extractoras deben aumentar su capacidad para aprovechar las nuevas tecnologías de manera que resulten eficientes y rentables.

Alexandre Cooman, en la foto a la izquierda, sostuvo que la palmicultura del país ha crecido 80 % en área en una década y se ha hecho de forma sostenible con el ambiente por lo que 99 % de las zonas cultivadas son libres de deforestación, tal como lo exigirá el mercado europeo a partir de 2025. “El crecimiento ha sido inclusivo y promoviendo el bienestar, pero a la vez implica nuevos retos más allá del incremento de área y productores”.
Hay un entorno de mayor complejidad e incertidumbre relacionado con realidades ambientales y exigencias de calidad. Las brechas en productividad son diversas y complejas y para ello la asistencia técnica genera cambios en adopción tecnológica ampliando la cobertura con un enfoque integral.
Por su parte, el presidente ejecutivo de Fedepalma, Nicolás Pérez Marulanda, en la foto de arriba (a la derecha), manifestó que existen grandes retos para el sector y para ello hay un intercambio de experiencias entre lo que viene haciendo Cenipalma y el trabajo de las empresas palmeras y de los palmicultores para crear una efectiva comunicación en doble vía, en la cual los científicos se nutren de la experiencia práctica y los palmicultores ayudan a validar y verificar en campo, los avances tecnológicos que se vienen desarrollando.

Al hablar de la producción de aceite de palma, Pérez Marulanda expresó que, el sector palmicultor ha tenido un par de años muy favorables en materia de producción gracias a que ha habido un buen clima y que los precios han propiciado la correcta atención de los cultivos y esto se ha demostrado en unas cifras de producción récord en los últimos dos años y que en lo corrido de 2023 se ha consolidado.
Sin embargo, el directivo de Fedepalma advirtió, “no podemos bajar la guardia y es muy importante que mantengamos la productividad, eficiencia, sostenibilidad y capacidad de adaptación a este entorno cada vez más volátil y cambiante”, afirmó el dirigente gremial.
Igualmente, Nicolás Pérez explicó que en Colombia es clave asegurar la calidad del aceite que se produce, porque el mercado cada vez es más estricto. Así mismo, “hay unos criterios que son fundamentales para la defensa de nuestros aceites a mejores precios y para el ingreso a nuevos mercados globales”.
El gremio palmero destacó lo hecho con la biomasa o el compost para potenciar suelos y darles vida con mejor nutrición, pero dijo que la apuesta por producción de gas metano con los desechos igualmente es una muestra de todo lo bueno que está pasando con un renglón económico que no para de innovar y trabajar por valores agregados y un mejor planeta.
Conclusiones de la 18a Reunión Técnica Nacional de Palma de Aceite 2023
Así como todos los años, el Centro Nacional de Investigaciones de Palma de Aceite -Cenipalma-, llevó a cabo el evento técnico y científico que presenta y analiza los principales avanzas en cuanto a Investigación y desarrollo (I&D) de la agroindustria de la palma de aceite en Colombia.

Bajo el lema “Retos de sostenibilidad para una palmicultura productiva e incluyente”, Cenipalma propició este año para los asistentes un evento con los adelantos en investigación, desarrollo, implementación de tecnologías y recomendaciones para el sector productor e industrial. Alexandre Patrick Cooman, director de Cenipalma, manifestó que el propósito de esta Conferencia Técnica es mostrar las innovaciones para la productividad y sanidad del cultivo, la eficiencia de plantas de beneficio y las prácticas de sostenibilidad en los diferentes eslabones de la cadena. En la foto, plenaria en el Centro de Convenciones Neomundo de Bucaramanga.
Un gran éxito constituyó la XVIII Reunión Técnica Nacional de Palma de Aceite en Bucaramanga, respecto de la asistencia, temáticas de interés para los participantes, visitas técnicas, interesantes en número y aspectos para compartir, y muestra Expopalma cada vez mayor en participación, además de las novedades y desarrollo general del evento en cuatro días, desde el 26 al 29 de septiembre.
De acuerdo con el director general de Cenipalma, Alexandre Patrick Cooman, este año se registró una asistencia récord con 1.620 personas, cuando hace 20 años fueron 350 asistentes y hace diez años fueron 1.000. “La participación crece como ha crecido el sector palmero y también como nuestra agenda en temas”.
Fue un evento que se ajusta a las necesidades de los palmicultores y llamó la atención la diversidad de participantes porque además de técnicos, asistieron dueños de plantaciones y muchos jóvenes, lo cual es importante por el tema del relevo generacional.
Entre los aspectos destacados por el directivo es que “el cultivo ya va siendo más que un negocio, va formando parte de la vida de las personas y eso es algo que queremos consolidar a futuro, que sea cada vez más parte de la cultura colombiana”.

Se necesita que la palma de aceite no represente solo un negocio sino que trascienda aún más a la vida de las personas y de las comunidades.
Es muy diferente un productor que viva de la palma de aceite y que en algún momento puede vender ese activo, a uno que realmente sienta la agroindustria y la tenga como proyecto de vida. Incluso puede servir como agroturismo, para hacer avistamiento de aves y de otras especies que se encuentran en ella, gracias a la biodiversidad generada por el cultivo.

Este año la cumbre técnica se realizó en Bucaramanga, con diferentes temáticas relacionadas con el cultivo, cosecha, poscosecha e industrialización del aceite de palma. La agroindustria ha logrado notables avances en cuanto a la innovación en la optimización de los procesos del cultivo y de la planta de beneficio. En la foto los directivos de Cenipalma (de izquierda a derecha), Hernán Mauricio Romero, director de Investigación; Alexandre Patrick Cooman, director general; y Jorge Alonso Beltrán, director de Extensión del centro de investigación.
La sostenibilidad de una agroindustria creciente en producción de aceite y desarrollo social
La agenda este año le dio gran énfasis al tema de sostenibilidad y dentro de esta temática un día completo a lo social, lo cual significa que el sector está al día con las tendencias mundiales.
Igualmente fue la oportunidad para compartir información que debe llevarse a acción y hay unos temas que se deben reflejar en mejoras en plantaciones y plantas de beneficio como, por ejemplo, los asuntos relacionados con adaptación al cambio climático y para lo cual se ha hecho énfasis en las medidas a tomar para que la plantación sea menos vulnerable al estrés hídrico que es lo que puede suceder en muchos casos.
Entre tanto, en plantas de beneficio el tema es mitigación para aportar al carbono neutralidad a partir del carpado de lagunas. En uno de los stands de la reunión técnica ya tenían nueve proyectos en curso para hacer estos carpados y órdenes adicionales para avanzar en ese proceso.
En la parte social fue una novedad tener un módulo dedicado al tema y ver cómo las empresas se mueven en acciones cada vez más proactivas frente a las nuevas realidades de trabajar en inclusión, donde todavía hay un camino por recorrer.
Lo más destacado de la investigación científica para el mejoramiento de la palmicultura
De acuerdo con el director de Investigación de Cenipalma, Hernán Mauricio Romero, “mediante la expansión de la palmicultura en Colombia surgen muchas necesidades y retos, pero también enormes oportunidades”.
La investigación que hace Cenipalma está orientada a suplir las necesidades de los palmicultores y un porcentaje muy alto del presupuesto se va en cómo enfrentar las principales plagas y enfermedades que atacan al cultivo.
Igualmente, se trabaja en la sosteniblidad de la agroindustria, con unos recursos cada vez más escasos, en aspectos como el agua, los suelos y un ambiente que se debe proteger, siendo muy responsables y coherentes. A ello se suma la utilización de la microbiología que ayude a hacer control biológico y a mejorar la fertilidad de los suelos.
También en procesamiento hay un reto muy grande sobre cómo mejorar las plantas y hacerlas más sostenibles, a ello se suma el trabajo de carpar las lagunas para capturar el metano y contribuir a la reducción de la huella de carbono.
Los mercados también exigen calidad de los aceites y en eso también se trabaja porque hay contaminantes que antes no eran visibles y que hoy se vuelven importantes dentro de toda la cadena.
“En últimas lo que se busca es ver cómo se le da mayor valor a la cadena y esto se logra lanzando nuevos productos para distintos mercados, pero también mejorando lo que se tiene y añadir tecnología de punta en todo lo que se hace, desde el pequeño hasta el más grande, desde que se inicia la siembra hasta cuando se logra el producto”, indicó Romero.
De igual manera, el director de Extensión de Cenipalma, Jorge Alonso Beltrán, recordó que “Cenipalma cuenta con una estructura de base donde están comités locales técnicos que hacen la priorización de las necesidades y después se reúnen en un comité regional donde se definen las prioridades de cada región”.
En su opinión, “en estas reuniones se comparten muchas experiencias, algunas de las cuales responden a las necesidades que exponen los palmicultores”.
Beltrán manifestó que, “para Cenipalma es fundamental el trabajo que se hizo de caracterización socioeconómica del sector palmero porque permite conocer más al palmicultor, su cultura, las necesidades y de qué manera llegarle. Hay tecnologías en las cuales opera muy diferente la forma de llevarla a poblaciones tales como Tumaco, Urabá o Catatumbo”.
Según los funcionarios de Cenipalma, todo ese conocimiento que se tiene de los productores permite llegar mejor como institución al productor y comunicar el mensaje de manera más asertiva. Conocer cómo es la conectividad y donde están los palmicultores permite empezar a buscar estrategias para llegar mejor a ellos.

Las enfermedades emergentes le generan preocupación a los productores
En cuanto a la afectación de los híbridos por la Pudrición del Cogollo (PC), Hernán Mauricio Romero manifestó que estos materiales son resistentes a la enfermedad pero no inmunes y de hecho eso tampoco se quiere porque desde el punto de vista genético se rompe muy fácil la resistencia.
Cuando se asegura una alta resistencia, hay mecanismos genéticos que están funcionando y que hacen que se puedan tener cultivares que duran mucho tiempo y eso es lo que se quiere con el híbrido.
Así mismo, se refirió a las enfermedades emergentes y señaló que son varias las que preocupan, además de la Pudrición del Cogollo (PC) y la Marchitez Letal (ML) que estaba concentrada en la zona oriental pero ya está llegando a la central y es posible que llegue a la zona norte, lo que hace que el panorama del trabajo tenga que ampliarse y reforzarse a nivel nacional.
Adicionalmente hay una enfermedad “que ha puesto de rodillas a la agroindustria en el sudeste asiático que se llama la Pudrición Basal del Estípite que se presenta después de la segunda generación de la palma de aceite y en Colombia ya tenemos plantaciones que están arrancando con su tercera generación”.
Cenipalma ya hizo una investigación que muestra que el patógeno es muy parecido al del sudeste asiático sin ser el mismo y “ese puede ser un problema mayúsculo si desde el comienzo los palmicultores no le ponen toda la atención a esta enfermedad porque es muy fácil que se disperse y después es muy difícil de erradicar”. En Colombia se tienen unos casos en la zona norte, otro en la zona central y uno más en la oriental.
Adicionalmente, hay enfermedades emergentes en los híbridos. En la medida en que va creciendo el área sembrada se encuentran enfermedades que no habían hecho su aparición en las palmas africanas. “Por ejemplo, nosotros descubrimos un nuevo hongo para el mundo que ataca a los híbridos interespecíficos y, aunque no es letal, tiene un impacto en las hojas”.
Así mismo hay otra enfermedad en los híbridos que va pudriendo las bases de las hojas y se ve cómo van saliendo focos a nivel nacional y del cual no se tenía conocimiento.
Al final del evento, Alexandre Cooman indicó que el reto para la próxima Reunión Técnica es mantener al menos el mismo número de asistentes y una agenda nutrida como la de este año, que llame la atención de los participantes y que quieran continuar apostando por la prosperidad de su negocio y por ende de su vida y comunidad.

Temáticas de alto valor científico
Carlos Ricardo Bojacá, PhD., investigador de Geomática de Cenipalma, presentó el panorama estratégico del manejo y flujo de datos, al igual que el potencial de uso de herramientas para la utilización de la información generada por cada eslabón, empresa o dependencia en la agroindustria. A partir de ventajas, desventajas y desafíos que presentan las herramientas digitales, se propondrán estrategias para la captura, procesamiento y análisis, que confluyen en la toma de decisiones frente a problemáticas del cultivo.
Son innovaciones asequibles para el manejo oportuno de datos, punto de partida en la optimización procesos, y construcción de modelos de predicción. Se presentará el Machine learning o aprendizaje automático, una rama de la inteligencia artificial que permite la identificación de patrones asociados al análisis de datos.
Con este tipo de herramientas, se busca hacer frente al reto del manejo de grandes volúmenes de datos, que en la actualidad entraña mejorar flujos de entrada y salida de información, establecimiento de trabajos colaborativos que permitirán comprender sus procesos, y realizar el control de la producción. Habrá más de 60 presentaciones de trabajos y experiencias, exhibición de más de 70 pósteres, muestra comercial, y entrega de reconocimientos.

Intercambio y sostenibilidad
Como se ha hecho en otras oportunidades, esta conferencia abre la posibilidad, para que otras entidades de investigación hagan presencia, como el Centro Nacional de Investigaciones en Café -Cenicafé-. El investigador científico, Nelson Rodríguez Valencia, dictó una de las charlas de apertura del módulo de Plantas de Beneficio, el 28 de septiembre. “Sistemas de tratamiento naturales para el postratamiento de los efluentes generados en diferentes agroindustrias”, presentando soluciones para la agricultura en el postratamiento de aguas residuales industriales, a partir de procesos naturales, evitando el uso de productos químicos.
Además, bajo diferentes prácticas, como el uso de microorganismos, humedales artificiales, y la presentación de filtros verdes, como un avance tecnológico en el cuidado del suelo, se presentarán alternativas enmarcadas en el cumplimiento de la normativa de vertimientos y extinción de dominio por daños a ecosistemas.
En torno a la sostenibilidad, su conferencia contó con una agenda especializada que incluyó charlas magistrales, entre las que se destacaron el cambio climático, agricultura e inclusión social, y nuevas tecnologías digitales.
También hubo charlas especializadas como: Visión integral de productividad en plantas de beneficio; Diagnóstico de la calidad de aceite; Huella de carbono del aceite; Desarrollo bajo en carbono y mercados de carbono; Derechos Humanos y Género; Cultivares híbridos interespecíficos OxG; Avances en biología molecular0; y Manejo de enfermedades y plagas.
Se presentaron 69 experiencias, de núcleos palmeros de las cuatro zonas de producción, responsables de mostrar las mejores actividades productivas, ambientales y sociales. Se socializaron los avances, innovaciones y resultados en materia de implementación de prácticas y estrategias empresariales, que se evaluarán en la plenaria, y serán reconocidos aquellos que, por su posibilidad de replicarse en otros contextos, y su aporte a la producción sostenible, sean ejemplo.
Hubo una inmensa exhibición de pósteres académicos, para dar a conocer avances en investigación, e intervención social y ambiental, que desarrollan profesionales del sector. Y muestra comercial Expopalma, con soluciones tecnológicas y servicios para enfrentar desafíos de sanidad, productividad y sostenibilidad.
Las visitas el 26 de septiembre, y lanzamiento de publicaciones, completaron la agenda. Todo constituyó una oportunidad para ejemplarizar los mejores productores de pequeña y mediana escala, con sobresaliente productividad, con un mensaje: es posible producir palma aplicando las mejores prácticas agrícolas, y siendo respetuosos con el entorno social y ambiental.
