Alejandro Vargas
Arlés, Francia
El Parc des Ateliers, que en el siglo XIX funcionó como un sitio industrial de reparación y construcción de trenes de la ciudad de Arlés, en el sur de Francia, ha sido renovado para servir a nuevos fines culturales. Hoy en día, alberga el complejo artístico Luma Arlés, un centro de arte contemporáneo e investigación que se enfoca en explorar las intersecciones entre el arte, la cultura, el medio ambiente, los derechos humanos y la ciencia.
Creado por la millonaria suiza Maja Hoffmann, heredera de la fortuna farmacéutica Roche, Luma Arlés da nueva vida a las ruinas industriales de una antigua estación ferroviaria, abarcando más de 11 hectáreas. Su arquitectura y diseño son el resultado de un proceso investigativo que cartografió los recursos, industrias y desechos de la región, así como los flujos de materiales biológicos y conocimientos locales. Muchos de los materiales utilizados, de carácter experimental, se emplearon tanto en la torre principal como en las estructuras aledañas, incluyendo el edificio de Atelier Luma, el centro de investigación de diseño de Luma Arlés.
El espacio se organiza en torno a un parque-jardín público, diseñado por el arquitecto paisajista Bas Smets, y un grupo de talleres ferroviarios reconvertidos en salas de exposiciones por Annabelle Selldorf. En el corazón del complejo artístico se destaca un edificio con una fachada de formas geométricas y una base cilíndrica, que evoca una torre babilónica. Este edificio ecológico hecho con métodos de construcción orgánicos y de origen local se ha convertido en un símbolo arquitectónico de Arlés y en un referente de la innovación en tecnología, estética y sostenibilidad.
Arlés se encuentra a orillas del río Ródano y está rodeado por dos reservas naturales: los humedales de la región de la Camarga y la cordillera de Les Alpilles. La luz y el entorno natural de la ciudad inspiraron al pintor holandés Vicent van Gogh. En 1981, Arlés fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, debido a su rico legado romano y románico, que incluye monumentos como el Anfiteatro de Arlés, el teatro antiguo, Cryptoportico del Foro y la necrópolis de Aliscamps.
Sostenibilidad y eficiencia energética
La construcción del Parc des Ateliers se basó en un enfoque paisajístico que prioriza la eficiencia energética, la gestión responsable del agua y la utilización de materiales sostenibles. Lo que antes era una vasta extensión de hormigón desprovista de vegetación, creando condiciones climáticas áridas, ha sido transformado en un parque ecológico. El paisajista Smets abordó el rediseño del sitio estudiando primero los procesos naturales del lugar, como el viento y la exposición al sol, aprovechando estas fuerzas para crear un entorno que fluye con la naturaleza, en lugar de imponerse sobre ella.
Smets denomina este enfoque «arqueología del futuro», ya que su objetivo no era imitar a la naturaleza, sino utilizar su lógica para dar forma al parque a través de las fuerzas naturales, acelerando así un proceso que normalmente llevaría siglos. Esta metodología se basa en facilitar la naturaleza sin establecer una nueva ecología urbana.
Izquierda: El parque ecológico de Luma Arlés con la icónica torre de Frank Gehry. Derecha: Antiguos talleres industriales transformados en salas de exposiciones. Fotografía: © Alba Rodríguez 2024.
El Parc des Ateliers alberga un estanque, 650 árboles, 500 arbustos nuevos y 80.000 mil plantas de cobertura del suelo, creando así un ecosistema que ha aprendido a coexistir y colonizar el sitio árido y artificial. La flora seleccionada es autóctona de la región que rodea Arlés e incluye biotopos de la Camarga, Crau y los Alpilles, tres distintos hábitats concentrados en una sola área.
El crecimiento de la vegetación se beneficia de un sistema de acuicultura permanente que se alimenta del agua del Canal de Craponne, construido en el siglo XVI y que proviene del río Durance, situado cerca del parque.
El gran estanque del parque no sólo actúa como depósito de agua para el riego, sino que también sirve como refugio en los calurosos días de verano. Junto con la nueva topografía y la introducción de una diversidad de plantas locales, se contribuye a la creación de un microclima que transforma el árido desierto de hormigón en un exuberante parque público.
El diseño del parque utiliza modelos de evaluación climática que permiten analizar las condiciones ambientales exteriores. Con soluciones de infraestructura verde y de gestión hídrica sostenible, así como una vegetación bien regada y adecuada sombra, se mejora el confort térmico exterior durante el año.
Izquierda: El interior de la torre de Gehry tiene paneles de acero inoxidable que permiten reflejar la luz solar. Derecha: Antiguos talleres industriales transformados en espacios abiertos al público. Fotografía: © Alba Rodríguez 2024.
Inspiración local y materiales sostenibles
En el corazón del Parc des Ateliers se erige una torre de metal arrugada, de 56 metros de altura, inaugurada en junio de 2021. Este edificio de 15.000 metros cuadrados, diseñado por Gehry en colaboración con Hoffmann. La torre alberga diversos espacios polivalentes que incluyen galerías de arte, áreas de trabajo e investigación, así como salas para eventos.
La estructura de Gehry está revestida con 11.000 paneles de acero inoxidable dispuestos de forma irregular, lo que permite que reflejen la luz solar y que sus destellos interactúen con los cambios de luz a lo largo del día. Este diseño rinde homenaje a los paisajes pintados por van Gogh durante su estancia en Arlés, y su habilidad para capturar las variaciones de luz y los matices del cielo.
En el interior, se han utilizado materiales naturales como sal marina, girasoles y algas, con el objetivo de reducir la huella de carbono del edificio.
Los vestíbulos de los ascensores del noveno piso están revestidos con 4.600 paneles de sal cristalizada procedentes de las salinas de la Camarga. Estos paneles fueron desarrollados por Atelier Luma, el laboratorio de diseño e investigación de Luma. El proceso de creación de los paneles consistió en sumergir durante diez días láminas de metal perforadas bajo el agua en las marismas, —terrenos bajos y pantanosos inundados por el mar— permitiendo que los cristales de sal se adhirieran a toda la superficie. Los paneles, al ser traslúcidos, no sólo aportan una estética única al entorno, sino que también mejoran la luminosidad.
Las semillas de girasol, cultivadas localmente, se prensan para producir biocombustible que alimenta el edificio. Las paredes de la planta baja están revestidas con un material a base de médula de girasol, elaborado a partir de los residuos de esta planta. Además, los baños del edificio están decorados con azulejos multicolores de bioplástico, hechos con tintes de algas recolectadas y plantas invasoras y tintóreas.
El diseño de Gehry evoca la arquitectura romana: el atrio circular y acristalado que sirve como base para la estructura se inspiró en el antiguo anfiteatro romano de Arlés, mientras que la fachada retorcida de la torre, hace referencia a los escarpados acantilados de piedra caliza de Les Alpilles. Una conexión simbólica entre el pasado romano arlesiano y el presente contemporáneo.
En 2023, Atelier Luma culminó la renovación de uno de los antiguos talleres industriales, al que se le ha dado el nombre de Le Magasin Électrique y actualmente funciona como la sede principal del centro de investigación. Los elementos estructurales del edificio, como los muros de las paredes, están hechas de residuos de tierra apisonada, que combina escombros de demolición y piedra caliza local con arcilla blanca, logrando un acabado similar al hormigón, pero con una menor huella de carbono.
La acústica y el acabado de los interiores se han realizado con paneles de fibras de girasol, paja de arroz y tierra de la biorregión. Fardos de paja de arroz se usaron como aislamiento térmico. El suelo de terrazo, los azulejos del baño, los tintes y las manijas de las puertas están elaborados a partir de algas, sal, bioplásticos, tierra y esmaltes de origen local.
Luma Arlés se ha posicionado como un centro para la creación y exposición de arte contemporáneo, atrayendo a artistas de renombre y a una audiencia global. Actualmente se exhibe la obra de William Kentridge, una exposición que aborda temas relacionados con la inmigración, la opresión, las relaciones raciales y la transmisión de la historia. El proyecto Luma no sólo revitaliza la escena cultural de Arlés, sino que también representa un rechazo a técnicas y procesos obsoletos utilizados en la arquitectura y el diseño, abriendo así paso a una nueva era de bio-arquitectura sostenible.
Alejandro Vargas
Arlés, Francia
Fotografía:
Alba Rodríguez