Los beneficios de la carne de wagyu son realmente valiosos y ninguna otra raza de ganado los tiene. Por ejemplo, la grasa entreverada, esas vetas que forman su acumulación intramuscular, contienen y cuenta en mayor proporción con ácidos grasos mono insaturados. Esta particularidad hace por su consumo, que el riesgo de contraer enfermedades cardiacas se reduzca a diferencia de otros tipos de carne.
Además, contiene una elevada proporción de ácidos grasos, como Omega 3, Omega 6 y Omega 9, los cuales regulan la presión sanguínea, previenen la artritis, la hipertensión y el cáncer.
Por lo tanto, como parte de una dieta sana y equilibrada, esta carne es una alternativa ideal. Aun más, entre los tipos de ácidos grasos que contiene esta carne de wagyu se haya el oleico, el cual se ha demostrado que aumenta los niveles de colesterol bueno (HDL) y reduce los del colesterol malo (LDL).
Así mismo, su grasa saturada es distinta. “Y tenemos que añadir –asegura Juan Manuel Sánchez–, que el wagyu contiene mayor cantidad de ácido linoleico (CLA) que cualquier otro alimento, un componente con propiedades anticancerígenas. De todo esto es responsable la genética, el cuidado y la alimentación de los animales. Es realmente una carne sana y saludable”.
Tipos:
Hay cuatro tipos de wagyu en Japón, y se conocen como: japonesa negra, japonesa café o marrón, japonesa sin cuernos, japonesa de cuerno corto. Por las dificultades de traslado dentro de las regiones, sumada a la diferente utilización y manejo de la genética, el wagyu de una zona, es diferente a la de otra, dando origen a diferentes líneas, así: tajima o tajiri, shimane o fujiyoshi, kedoka o tottori, kumanoto.
La res japonesa negra, originalmente era utilizada para las labores del campo desde el siglo II de nuestra era. Más tarde, hacia mediados del siglo IXX, la raza se mejoró cruzándola con otras variedades extranjeras, para destinarla a la producción de carne. Se certificó como vacuno autóctono japonés en 1944. Hoy es el tipo de res más común en Japón, representando más del 90 % del total de ganado bovino autóctono.
La carne contiene el más alto índice de marmoreo y es además la única que puede dar autentica carne de Kobe, en el sur este de la isla, donde por su escarpada geografía no permitió que se cruzara con otros animales durante siglos y mantuviera hasta el día de hoy, sus características únicas.